Tom Ford Op Art
A diferencia de Renzo Rosso - el nuevo patrón de la Maison Martín Margiela -, que el día de la presentación del primer desfile de John Galliano para la misma se desgañitaba implorando a todos los presentes que no hicieran fotos, Tom Ford parece haberse deshecho, felizmente, de su política de "No pictures!".
Desde que fundó su marca en el año 2005, la primera vez que el diseñador organizó un auténtico desfile con modelos, invitados y prensa fue durante la London Fashion Week del 2013. Hasta esa fecha, el diseñador había hecho del secretismo su marca de fábrica.
Nos alegra un montón que a sus 53 años, y después de haberse convertido en padre del pequeño Alexander John Buckley Ford, haya decidido ir por la vida ligero de equipaje, y que para ello haya aprendido a soltar lastre. Los resultados se notan incluso en las nuevas siluetas de su colección otoño-invierno 2015 que parecen menos formales de lo habitual, como aligeradas. El día del desfile, Ford bromeó incluso con la prensa. ¡Ver para creer!
Claramente inspirada en una estética retro muy años 60, los looks que integran esta colección son fundamentalmente bicolor, en blanco y negro, con estampados Op Art sobre chaquetas de seda o de terciopelo de un sólo botón con corte slim fit, adornadas con solapas y vivos de raso negro en los puños de las mangas y en los bolsillos.
Estas chaquetas se combinan con camisas blancas y pajaritas, o con jerséis de de cachemire de cuello vuelto de color negro a juego con pantalones lápiz diseñados para estrechar visualmente las caderas y hacer las piernas lo más delgadas y largas posible.
En lo relacionado con sus propuestas más sport, durante el desfile se pudieron ver hasta tres estilos de pantalones vaqueros diferentes a juego con chaquetas de piel vuelta o chaquetas de ante forradas de borrego tipo aviador, todo muy casual y muy easy wear.
